El diamante Cullinan
El descubrimiento del Diamante Cullinan
El diamante Cullinan fue descubierto en 1905 en la mina Premier en Pretoria, Sudáfrica. Premier Mine fue una de las minas de diamantes más grandes del mundo y produjo piedras preciosas de la más alta calidad durante décadas.
El diamante fue descubierto por Frederick Wells, el superintendente de la mina Premier, mientras supervisaba el funcionamiento de la mina. Al principio, Wells pensó que había descubierto un trozo de vidrio, pero pronto se dio cuenta de que había encontrado algo mucho más valioso.
El Cullinan fue transportado a Londres para ser presentado al rey Eduardo VII. Entonces, el Rey decidió regalárselo a la Corona británica.
Cortar el diamante Cullinan
El corte del diamante fue confiado a la famosa compañía de cortadores de diamantes Asscher de Londres. Joseph Asscher y su hermano Abraham trabajaron durante casi ocho meses cortando y tallando la piedra en bruto.
El proceso de corte de diamantes de Cullinan era arriesgado y complejo, ya que cualquier error podía romper la piedra preciosa. Finalmente, la piedra se dividió en nueve piedras más pequeñas y alrededor de 100 fragmentos.
Las piedras cortadas fueron entonces nombradas según su tamaño y forma. La piedra más grande, que pesaba más de 500 quilates, recibió el nombre de Cullinan I o la Gran Estrella de África. Es la piedra tallada más grande del mundo. La segunda piedra más grande, que pesa alrededor de 317 quilates, ha sido nombrada Cullinan II o la Segunda Estrella de África. Esta piedra es también una de las piedras cortadas más grandes del mundo.
El Diamante Cullinan hoy
El diamante Cullinan es ahora una pieza central de la corona británica y está en exhibición pública en la Torre de Londres. Las otras piedras cortadas del Diamante Cullinan también están en exhibición, varias de las cuales están en la colección privada de la Reina.
Además de ser una de las gemas más valiosas del mundo, el diamante Cullinan también tiene una historia fascinante. El proceso de corte de la piedra en bruto fue seguido de cerca por los medios de comunicación de todo el mundo, y el descubrimiento del diamante fue visto como un símbolo de la riqueza y el poder del Imperio Británico en ese momento.
En última instancia, el diamante Cullinan sigue siendo un símbolo de belleza, riqueza y poder. Su tamaño y pureza la convierten en una de las gemas más espectaculares y valiosas jamás descubiertas.